La información es un recurso tan importante como el capital o los materiales: sin una buena comunicación, la organización no puede funcionar correctamente.
En la empresa, la información circula entre los distintos niveles y departamentos, permitiendo que:
- Las órdenes lleguen a quienes deben ejecutarlas.
- Los responsables conozcan los resultados y problemas.
- Se tomen decisiones fundamentadas y oportunas.
El flujo de la información puede tener distintas direcciones (vertical, horizontal o diagonal) y transmitirse por canales formales (documentos, informes, reuniones) o informales (conversaciones, relaciones personales).
En este apartado estudiaremos:
- Los diferentes tipos de flujos de información.
- Los canales y soportes que facilitan la comunicación.
- La importancia de una gestión adecuada de la información para evitar errores, retrasos y conflictos.